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II. eligiendo el lugar de cultivo:
exterior o interior
Cultivo exterior
Para crecer en exterior no necesitas comprar luces ni equipo de interior, por lo que de inicio es más barato, pero tendrás que preocuparte de las lluvias excesivas o los climas muy extremos, la posible polinización de tus plantas por culpa de machos en tu área (nunca sabes si un vecino inexperto termina cultivando un macho y no se deshace de él), animales y todo tipo de bichos, o incluso la posibilidad de que te roben tus plantas. Además, tendrás que ser discreto si el cultivo es ilegal en tu país o si tienes vecinos a quienes no les guste la idea de un plantío de marihuana.
Sin embargo, con una genética y condiciones climáticas adecuadas, cultivar en exterior puede ser sumamente gratificante! Para empezar, no hay mejor luz para tus plantas que la proporcionada por el sol; algunos growers creen que el sabor y aroma de los cogollos cultivados en exterior es inigualable. Además, tienes la posibilidad de cultivar árboles de 3 o 4 metros!
Una planta gigante cultivada en exterior
Esto, claro, difícilmente podrás hacerlo si vives en un lugar pequeño. Pero en términos prácticos, con tener un espacio disponible donde pegue la luz del sol de forma directa por lo menos 8 horas al día (entre más mejor), es más que suficiente para montar tu área de cultivo. Eso sí: es muy importante que si las condiciones climáticas de tu zona no son ideales para la planta, la protejas. Puedes hacerlo, por ejemplo, construyéndole un pequeño invernadero.
Otra cosa a tomar en cuenta es que si cultivas en exterior, tienes una ventana de tiempo para plantar las semillas. En la mayor parte de México tenemos la ventaja de poder cultivar todo el año, aunque lo recomendable es hacerlo entre finales de febrero (cuando está terminando el invierno) y principios de julio. En exterior por lo general necesitas tiempos más largos para cosechar (a menos que cultives autoflorecientes). Plantar en exterior puede ser ideal para ti si vives en el campo o tienes un jardín muy grande, pero de igual forma lo puedes hacer en un balcón o un patio pequeño.
Un ejemplo de cultivo de cannabis en balcones
Las ventajas de cultivar en exterior son:
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Es más sencillo. No por nada a la marihuana le decimos hierba: es una planta guerrera, y bajo la luz del sol, puedes sembrarla y dejar que la madre naturaleza haga su trabajo.
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Costos de inicio mucho más bajos. Incluso puedes cultivar sin invertir un peso.
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Cosechas más grandes. En exterior, las plantas tienen mucho más espacio para crecer enormes.
Las desventajas:
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Estás a merced de los elementos. Una tormenta muy fuerte, una oleada de calor, una plaga de insectos, o incluso el gato de un vecino (o tus propias mascotas) pueden destruir tus plantas.
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Falta de privacidad. Tus plantas pueden ser fácilmente descubiertas. Depende del lugar en el que estés, esto puede ser un inconveniente imposible de pasar por alto.
Cultivo interior
Puedes cultivar cannabis en interior en cualquier lugar que tenga acceso fácil a agua y aire fresco:
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Un cuarto libre en tu casa o departamento
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Un closet
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Un garage
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Una tienda de cultivo (nuestra opción recomendada!)
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Un baño
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¡Dentro de una cubeta espacial!
Algo que debes considerar es la temperatura y la humedad de tu espacio de cultivo, recordando que la temperatura va a subir una vez que enciendas tus lámparas. Tanto la temperatura como la humedad son muy importantes, por lo cual debes monitorearlas y ser capaz de bajarlas o subirlas si tu espacio no está en el rango adecuado. Si la temperatura es muy alta, deberás considerar instalar aire acondicionado o un sistema de ventilación que reemplace el aire caliente; si es muy fría, calefacción. Si la humedad es muy alta, tendrás que usar un dehumidificador y si es muy baja, un humidificador.
Cuando cultivas en interior, es indispensable contar con una o varias luces artificiales que tengan un espectro de color parecido al del sol. También es indispensable que tu espacio por dentro sea de un material que refleje mucho la luz, y por fuera esté blindado contra ella, para evitar contaminación lumínica durante la etapa de floración; es por ello que recomendamos ampliamente el uso de una tienda de cultivo.
Una clásica tienda de cultivo. Es pequeña y práctica
Las ventajas de cultivar en interior son:
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Control completo de tu cultivo: tienes la capacidad de controlar temperatura, horas de luz, humedad, y muchos otros factores que son imposibles de controlar en el exterior. Esto se traduce en mucha consistencia en tus cosechas, pero, como diría el tío Parker: un gran poder trae una gran responsabilidad: tus plantas dependerán mucho más de ti, y si no les creas las condiciones correctas y estás al pendiente de ellas, tus plantas probablemente mueran.
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Privacidad y seguridad: es muy fácil cultivar en un espacio pequeño sin que absolutamente nadie sospeche que lo haces. Esto es un factor a considerar en un país como México, donde puedes estar rodeado de gente que no le agrade la idea de que cultives mota.
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Tiempos de cultivo más cortos. Las plantas suelen crecer más rápido (debido a los horarios prolongados de exposición a la luz), y tienes el control de cuándo mandar tu planta a floración.
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¡Cultivos perpetuos! Al no necesitar del sol, puedes cultivar cualquier época del año y asegurarte de jamás quedarte sin marihuana.
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Potencia: muchos growers creen que los cogollos que se forman en interior son de mucho mayor potencia que los cogollos que se forman en exterior (esto está a debate, no conocemos ningún estudio serio que lo avale). Lo que es un hecho, es que la mota cultivada en interior casi siempre se vende más cara que la mota cultivada en exterior.
Por otro lado, las desventajas son:
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Costos de inicio más altos. Sin duda es más costoso que cultivar en exterior, pero lo cierto es que te sorprendería lo económico que puede ser empezar un cultivo en interior, con muy poco dinero y mantenimiento, especialmente si tu plan es crecer pocas plantas.
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Mayor gasto en electricidad, aunque con cultivos pequeños y usando lámparas LED (la última tecnología en luces de crecimiento), el alza de consumo en tu recibo de luz no será tan grande.
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Mayor necesidad de mantenimiento y limpieza.
Uno de nuestros espacios de cultivo interior
